Fundación: 1972 – Inclusión en la NHL: 1979
Localización: Edmonton, Alberta, Canada
Northwestern Division, Western Conference
Estadio: Rexall Place (capacidad para 16,839 espectadores)
Maximo anotador: Wayne Gretzky (1,669 Points)
Máximo goleador: Wayne Gretzky (583 Goals)
El 1 de Noviembre de 1971 los Edmonton Oilers se convertirían en uno de los doce equipos fundadores de la WHA (Western Hockey Assosiation). Su propietario, Bill Hunter, había intentado varias veces entrar en la NHL, pero como esta no estaba por la labor, Hunter decidió formar una liga paralela.
Como Hunter ya tenia un equipo en Junior Hockey llamado Edmonton Oil Kings, los tomó como referencia al ponerles el nick de “Oilers”.
Como curiosidad, comentar que en el primer año los Oilers se llamaron Alberta Oilers porque el otro equipo que iba a participar de esa provincia, los Calgary Broncos, fueron reubicados a Cleveland.
Los Oilers eran bastante populares y más o menos exitosos con buenos jugadores como el defensa Al Hamilton, el goalie Dave Dryden y los forwards Bill Flett y Blair McDonald, pero no fue hasta el 78 donde se hicieron realmente fuertes con uno de los mejores trades de la historia del hockey. El nuevo propietario, Peter Pocklington, se hacía por una suma de dinero con el goalie Eddie Mio, Peter Driscoll y un jovencito muy prometedor llamado Wayne Gretzky que llegaron desde los desaparecidos Indianapolis Racers. Los Oilers fueron el mejor equipo de la regular season con un récord de 48-30-2 pero cayeron en la final contra sus rivales de Winnipeg Jets en la que sería la última temporada de la WHA.
Un año después, para la temporada 79-80, los Oilers, junto con los Hartford Whalers, los Quebec Nordiques y los Winnipeg Jets eran admitidos en la NHL y hasta ahora los Oilers siguen siendo el único de esos cuatro equipos que sigue en su ciudad originaria.
Los Oilers perdieron a casi todos sus jugadores en el relocation draft para entrar en la NHL y sólo se podían proteger cuatro jugadores (entre ellos Gretzky) pero el GM Glen Sather hizo un buen trabajo en el expansion draft y en pocos años con la ayuda del chief scout Barry Fraser se hacía con lo que sería el core de los Oilers. Mark Messier, Jari Kurri, Glenn Anderson, Paul Coffey, Kevin Lowe, Grant Fuhr y Andy Moog.Con esos jugadores, junto con Gretzky, se obtenía la base para formar uno de los mejores equipos de la historia del hockey y el claro dominador de los ochenta.
Ya en su primera temporada en la NHL los Oilers se metían en playoffs y Gretzky, que estaba decepcionado porque por una “merger” rule no le dejaban optar al Calder Trophy (se lo llevo Ray Bourque) y porque la NHL le dió el Art Ross Trophy a Marcel Dionne aún estando los dos empatados a puntos y Wayne habiendo jugado un partido menos, se llevaría el Hart Trophy como MVP, algo que ningún teenager había logrado.
En la 80-81 Gretzky empezaba a dar muestras de su grandísima clase, llegando a romper los records en asistencias (109) y el de puntos (164) que hasta aquel momento tenian los ex-Bruins Bobby Orr y Phil Esposito, y junto con los rookies Jari Kurri, Paul Coffey, Andy Moog y Glenn Anderson los Oilers barrieron a los Habs en primera ronda de los playoffs y se plantaban en la final de la Stanley, perdiendola en seis partidos contra los NY Islanders de Bossy, Trottier y Potvin. Pero los Oilers dejaban una muy grata impresión y la mayoría de los expertos pensaban que no sería la última vez que estos llegarían a una final, ya que siete de los jugadores clave de los Oilers tenían 21 años o menos.
Los Oilers mejoraban drásticamente, se convertirían en el primer equipo de la historia en marcar 400 goles en la temporada y Gretzky seguia dominando la liga de una manera increible e iba a ganar los próximos ocho Hart Trophies al MVP de la liga, a parte de otros muchísimos más récords (entre ellos el de anotar 50 goles en 50 partidos, algo que solo Maurice Richards y Mike Bossy habían conseguido....Gretzky lo consiguió en 39!!).
Los de Alberta alcanzaban su segunda final de la Stanley en la temporada 82-83, pero perdian otra vez contra los Islanders. A pesar de perder la final en cuatro partidos, gracias a una labor increible del goalie de los Islanders, Billy Smith, todo parecía indicar que estabamos ante un cambio de dinastia.
Y así fue.
La temporada 83-84 fue una marcha militar de los Oilers, marcando un récord de 446 goles y ganando la Presidents Trophy con 57 victorias y 119 puntos. Se ganaron la revancha contra los Islanders en la final de la Stanley pero ésta vez ya se confirmó el cambio de generación y los Oilers ganaban la serie por 4-1. Mark Messier, que habia sido reconvertido de LW a Center a mediados de temporada hizo unos playoffs fantásticos y se hizo con el Conn Smythe de esa final.
Los Oilers repetían en el 85 ganando a los Flyers en la final. Gretzky, Kurry y Coffey establecieron records de anotación el playoffs y Gretzky se llevó el Conn Smythe con 47 puntos en los playoffs.
Ya en la 85-86 los Oilers seguían ganando y se llevaron la primera Presidents Trophy al mejor equipo durante la regular season. Kurri, Anderson y Gretzky anotaban todos más de 50 goles y Coffey establecía un nuevo record de goles para un defensa con 48, rebatándole el antiguo récord a Bobby Orr. Gretzky hacía un nuevo récord de asistencias con 163, dato increible porque hasta aquél entonces nadie había anotado esa marca en puntos (asistencias más goles). Además de esas 163 asistencias, Gretzky sumó 52 goles para un total de 215 puntos en una temporada, récord absoluto en la historia. Pero el “three-peat” no se producía, al caer de forma sorprendente contra los Calgary Flames en siete partidos en la final de la Smythe Division.
Pero a la siguiente temporada los Oilers volvían a por sus fueros, ganando la Stanley una vez más y de nuevo contra los Philadelphia Flyers. Ron Hextall, el goalie de los Flyers se lo ponia difícil a los Oilers con una actuación increible y acabó llevandose el Conn Smythe.
Pero no todo era bueno en Edmonton y Paul Coffey pedía el traspaso por no estar contento con su contrato la siguiente temporada y fue a parar en Pittsburgh con otro grande, Mario Lemieux. Sín Coffey, los Oilers perdían una pieza importante y se notó en la regular. Los Oilers perdían su división contra los Flames, que también se llevaron la Presidents.
Aún así, los Oilers se pusieron las pilas y en playoffs volvían a ser imbatibles. Establecieron un nuevo récord en el formato de 16 victorias para la gloria de la Stanley, perdiendo solo dos partidos en todos los playoffs y barrieron a los Bruins de Bourque, Neely y Linseman en cuatro partidos. Bueno, realmente fueron cinco porque el cuarto partido en el Boston Garden se tuvo que suspender por un corte de luz con el partido empatado a 3. El partido se dió como empate y se volvió a Edmonton para el quinto, donde los Oilers no perdonaron y ganaron por 6-3 para ganar su cuarta Cup en cinco años.
En el verano siguiente a esa Stanley ocurrió un evento conocido como “The Trade” que dejó paralizado toda Canada y todo el mundo del hockey: Wayne Gretzky, junto con Marty McSorley y Mike Krushelnyski fueron traspasados a Los Angeles Kings por 15 millones de $, Martin Gelinas, Jimmy Carson y tres primeras rondas del draft.
Éste trade tuvo tanta repercusión que incluso el gobierno canadiense intentó paralizarlo, pero sin éxito. Los Oilers tenían que aprender a vivir sin The Great One.
Y claro, la siguiente temporada fue muy dura para los Oilers. Fueron eliminados justamente por los Kings de Gretzky en la primera ronda de playoffs y para más inri, los rivales de Alberta, los Calgary Flames, se llevaban la Stanley Cup.
Parecía que la grandeza de los Oilers llegaba a su fin, pero éstos se resistían. Después de una buena liga regular, se deshicieron de los Jets, Kings y Blackhawks para meterse en la final contra los Bruins, que buscaban revancha. Pero el grandísimo año de Mark Messier, que había tomado las riendas del equipo, del goalie Bill Ranford, que se llevaría el Conn Smythe y de Jari Kurri, que demostraba que sabía meter goles también sín Wayne, junto con la “Kid Line” de Gelinas, Adam Graves y Joe Murphy hacía que los Oilers se coronaran una vez más con el preciado trofeo de la Stanley.
Pero la felicidad iba a durar poco ya que Edmonton era un mercado relativamente pequeño y no podían competir con los salarios ofrecidos a los jugadores por otros equipos. De esta manera, poco a poco las estrellas fueron abandonando el estado de Alberta y Messier, Fuhr, Anderson y luego Graig McTavish aceptaban contratos más lucrativos, dejando el debate abierto de cuántas Cups más podrían haber ganado si Pocklington hubiese podido mantener sus estrellas en Edmonton. Sin ir más lejos, en los Rangers campeones del 94 jugaban nada menos que siete ex-Oilers, entre ellos Messier, Lowe, Graves y Tikkanen.
Con la espantada de las estrellas y unas elecciones poco convincentes en el draft, los Oilers pasaban por sus peores temporadas, quedándose fuera de playoffs en el 93 por primera vez desde que habían entrado en la NHL a pesar del emerger de Doug Weight y Jason Arnott.
También había problemas fuera del rink, ya que en el 98 los Oilers casi fueron vendidos a Houston pero sólo unas horas antes de hacerse efectiva la venta un consorcio de empresarios, The Edmonton Investors Group, compró el equipo a Pocklington y así se pudo mantener la franquicia en Alberta.
Aún así los Oilers se pudieron meter en playoffs por primera vez en cinco años y protagonizaban una sorpresa al eliminar al 2º seed Dallas Stars en la primera ronda. Esta eliminatoria daba el pistoletazo de salida a la rivalidad entre Edmonton y Dallas ya que entre el 97 y el 2003 estos dos equipos se iban a encontrar nada menos que seis veces en Playoffs, cinco de ellas en la primera ronda.
El 2003 vió nacer el Heritage Classic como parte de las celebraciones del 25º aniversario de los Oilers en la NHL. Fue el primer partido jugado “outdoors” y el rival elegido fueron los Montreal Canadiens, quienes ganaron por 4-3 delante de más de 50.000 espectadores en el Commonwealth Stadium de Edmonton.
Después del año del lockout en el 2004 y con la implantación del salary cap los Oilers vieron una oportunidad de hacerse con jugadores importantes y así se hicieron con el ex-ganador del Norris y Hart, Chris Pronger y el dos veces Selke Trophy, Mike Peca. Con estos jugadores, más el ídolo local Ryan Smyth, Rafi Torres, Shawn Horcoff, Ales Hemsky y Jarett Stoll los Oilers volvían a ser competitivos pero faltaba más solidez en gol, ya que ni Ty Conklin ni Jussi Markkanen parecían ser muy regulares. Así en la Trade Deadline del 2006 pudieron tradear por Dwayne Roloson y Sergei Samsonov provenientes de Wild y Bruins respectivamente.
Los Oilers quedaron octavos de la Western y se aseguraron los playoffs donde nadie daba un duro por ellos ante los Red Wings que venían de ganar la Presidents Trophy. Pero los Oilers sorprendieron a todos eliminando a los Wings en seis partidos y volvían a ganar una serie de playoffs desde 1998. En la semifinal de conferencia se deshicieron de los Sharks de Joe Thornton, también en seis partidos y se metían en la final de conferencia contra los Ducks donde una vez más partian como “underdog”. Era la primera vez que un 8º seed se metia en la final de conferencia desde que la NHL habia cambiado el formato de playoffs en el 94. En la final también dieron buena cuenta de los Ducks en cinco partidos y se volvian a meter en una final de la Stanley, esta vez contra los Carolina Hurricanes.
Era la primera final que jugaban dos equipos que antes habían sido integrantes de la WHA (los Canes habian sido los Hartford Whalers). Pero ahí se acabó el sueño de los Oilers y después de una disputada final cayeron en siete partidos.
Desde entonces, los Oilers han pasado por la NHL con más pena que gloria. Muchos jugadores que habian sido responsables del éxito de esos playoffs como Pronger, Smyth, Spacek o Samsonov y más recientemente Roloson, abandonaron Alberta y no han vuelto a jugar playoffs desde entonces.
Sigue la base de ese grupo como Hemsky, Horcoff o Moreau y el equipo se ha ido reforzando con Dustin Penner (en una acción bastante polémica por parte del GM Kevin Lowe porque fuéefichado de los Ducks cuando Penner era RFA), Sheldon Souray, Lubomir Visnovsky y Nikolai Khabibulin (este último en esta offseason) y cuentan con algunos jugadores jóvenes muy prometedores como las eternas promesas Patrick O’Sullivan y Rob Schremp, Marc Pouliot, Sam Gagner o Ryan Potulny que les harán luchar por los playoffs en esta próxima temporada.
Eso si, los tiempos de Wayne Gretzky y la dinastía de los Oilers queda bastante lejos y va a ser muy dificil de repetir.
Luis M Ledo aka Flea
Localización: Edmonton, Alberta, Canada
Northwestern Division, Western Conference
Estadio: Rexall Place (capacidad para 16,839 espectadores)
Maximo anotador: Wayne Gretzky (1,669 Points)
Máximo goleador: Wayne Gretzky (583 Goals)
El 1 de Noviembre de 1971 los Edmonton Oilers se convertirían en uno de los doce equipos fundadores de la WHA (Western Hockey Assosiation). Su propietario, Bill Hunter, había intentado varias veces entrar en la NHL, pero como esta no estaba por la labor, Hunter decidió formar una liga paralela.
Como Hunter ya tenia un equipo en Junior Hockey llamado Edmonton Oil Kings, los tomó como referencia al ponerles el nick de “Oilers”.
Como curiosidad, comentar que en el primer año los Oilers se llamaron Alberta Oilers porque el otro equipo que iba a participar de esa provincia, los Calgary Broncos, fueron reubicados a Cleveland.
Los Oilers eran bastante populares y más o menos exitosos con buenos jugadores como el defensa Al Hamilton, el goalie Dave Dryden y los forwards Bill Flett y Blair McDonald, pero no fue hasta el 78 donde se hicieron realmente fuertes con uno de los mejores trades de la historia del hockey. El nuevo propietario, Peter Pocklington, se hacía por una suma de dinero con el goalie Eddie Mio, Peter Driscoll y un jovencito muy prometedor llamado Wayne Gretzky que llegaron desde los desaparecidos Indianapolis Racers. Los Oilers fueron el mejor equipo de la regular season con un récord de 48-30-2 pero cayeron en la final contra sus rivales de Winnipeg Jets en la que sería la última temporada de la WHA.
Un año después, para la temporada 79-80, los Oilers, junto con los Hartford Whalers, los Quebec Nordiques y los Winnipeg Jets eran admitidos en la NHL y hasta ahora los Oilers siguen siendo el único de esos cuatro equipos que sigue en su ciudad originaria.
Los Oilers perdieron a casi todos sus jugadores en el relocation draft para entrar en la NHL y sólo se podían proteger cuatro jugadores (entre ellos Gretzky) pero el GM Glen Sather hizo un buen trabajo en el expansion draft y en pocos años con la ayuda del chief scout Barry Fraser se hacía con lo que sería el core de los Oilers. Mark Messier, Jari Kurri, Glenn Anderson, Paul Coffey, Kevin Lowe, Grant Fuhr y Andy Moog.Con esos jugadores, junto con Gretzky, se obtenía la base para formar uno de los mejores equipos de la historia del hockey y el claro dominador de los ochenta.
Ya en su primera temporada en la NHL los Oilers se metían en playoffs y Gretzky, que estaba decepcionado porque por una “merger” rule no le dejaban optar al Calder Trophy (se lo llevo Ray Bourque) y porque la NHL le dió el Art Ross Trophy a Marcel Dionne aún estando los dos empatados a puntos y Wayne habiendo jugado un partido menos, se llevaría el Hart Trophy como MVP, algo que ningún teenager había logrado.
En la 80-81 Gretzky empezaba a dar muestras de su grandísima clase, llegando a romper los records en asistencias (109) y el de puntos (164) que hasta aquel momento tenian los ex-Bruins Bobby Orr y Phil Esposito, y junto con los rookies Jari Kurri, Paul Coffey, Andy Moog y Glenn Anderson los Oilers barrieron a los Habs en primera ronda de los playoffs y se plantaban en la final de la Stanley, perdiendola en seis partidos contra los NY Islanders de Bossy, Trottier y Potvin. Pero los Oilers dejaban una muy grata impresión y la mayoría de los expertos pensaban que no sería la última vez que estos llegarían a una final, ya que siete de los jugadores clave de los Oilers tenían 21 años o menos.
Los Oilers mejoraban drásticamente, se convertirían en el primer equipo de la historia en marcar 400 goles en la temporada y Gretzky seguia dominando la liga de una manera increible e iba a ganar los próximos ocho Hart Trophies al MVP de la liga, a parte de otros muchísimos más récords (entre ellos el de anotar 50 goles en 50 partidos, algo que solo Maurice Richards y Mike Bossy habían conseguido....Gretzky lo consiguió en 39!!).
Los de Alberta alcanzaban su segunda final de la Stanley en la temporada 82-83, pero perdian otra vez contra los Islanders. A pesar de perder la final en cuatro partidos, gracias a una labor increible del goalie de los Islanders, Billy Smith, todo parecía indicar que estabamos ante un cambio de dinastia.
Y así fue.
La temporada 83-84 fue una marcha militar de los Oilers, marcando un récord de 446 goles y ganando la Presidents Trophy con 57 victorias y 119 puntos. Se ganaron la revancha contra los Islanders en la final de la Stanley pero ésta vez ya se confirmó el cambio de generación y los Oilers ganaban la serie por 4-1. Mark Messier, que habia sido reconvertido de LW a Center a mediados de temporada hizo unos playoffs fantásticos y se hizo con el Conn Smythe de esa final.
Los Oilers repetían en el 85 ganando a los Flyers en la final. Gretzky, Kurry y Coffey establecieron records de anotación el playoffs y Gretzky se llevó el Conn Smythe con 47 puntos en los playoffs.
Ya en la 85-86 los Oilers seguían ganando y se llevaron la primera Presidents Trophy al mejor equipo durante la regular season. Kurri, Anderson y Gretzky anotaban todos más de 50 goles y Coffey establecía un nuevo record de goles para un defensa con 48, rebatándole el antiguo récord a Bobby Orr. Gretzky hacía un nuevo récord de asistencias con 163, dato increible porque hasta aquél entonces nadie había anotado esa marca en puntos (asistencias más goles). Además de esas 163 asistencias, Gretzky sumó 52 goles para un total de 215 puntos en una temporada, récord absoluto en la historia. Pero el “three-peat” no se producía, al caer de forma sorprendente contra los Calgary Flames en siete partidos en la final de la Smythe Division.
Pero a la siguiente temporada los Oilers volvían a por sus fueros, ganando la Stanley una vez más y de nuevo contra los Philadelphia Flyers. Ron Hextall, el goalie de los Flyers se lo ponia difícil a los Oilers con una actuación increible y acabó llevandose el Conn Smythe.
Pero no todo era bueno en Edmonton y Paul Coffey pedía el traspaso por no estar contento con su contrato la siguiente temporada y fue a parar en Pittsburgh con otro grande, Mario Lemieux. Sín Coffey, los Oilers perdían una pieza importante y se notó en la regular. Los Oilers perdían su división contra los Flames, que también se llevaron la Presidents.
Aún así, los Oilers se pusieron las pilas y en playoffs volvían a ser imbatibles. Establecieron un nuevo récord en el formato de 16 victorias para la gloria de la Stanley, perdiendo solo dos partidos en todos los playoffs y barrieron a los Bruins de Bourque, Neely y Linseman en cuatro partidos. Bueno, realmente fueron cinco porque el cuarto partido en el Boston Garden se tuvo que suspender por un corte de luz con el partido empatado a 3. El partido se dió como empate y se volvió a Edmonton para el quinto, donde los Oilers no perdonaron y ganaron por 6-3 para ganar su cuarta Cup en cinco años.
En el verano siguiente a esa Stanley ocurrió un evento conocido como “The Trade” que dejó paralizado toda Canada y todo el mundo del hockey: Wayne Gretzky, junto con Marty McSorley y Mike Krushelnyski fueron traspasados a Los Angeles Kings por 15 millones de $, Martin Gelinas, Jimmy Carson y tres primeras rondas del draft.
Éste trade tuvo tanta repercusión que incluso el gobierno canadiense intentó paralizarlo, pero sin éxito. Los Oilers tenían que aprender a vivir sin The Great One.
Y claro, la siguiente temporada fue muy dura para los Oilers. Fueron eliminados justamente por los Kings de Gretzky en la primera ronda de playoffs y para más inri, los rivales de Alberta, los Calgary Flames, se llevaban la Stanley Cup.
Parecía que la grandeza de los Oilers llegaba a su fin, pero éstos se resistían. Después de una buena liga regular, se deshicieron de los Jets, Kings y Blackhawks para meterse en la final contra los Bruins, que buscaban revancha. Pero el grandísimo año de Mark Messier, que había tomado las riendas del equipo, del goalie Bill Ranford, que se llevaría el Conn Smythe y de Jari Kurri, que demostraba que sabía meter goles también sín Wayne, junto con la “Kid Line” de Gelinas, Adam Graves y Joe Murphy hacía que los Oilers se coronaran una vez más con el preciado trofeo de la Stanley.
Pero la felicidad iba a durar poco ya que Edmonton era un mercado relativamente pequeño y no podían competir con los salarios ofrecidos a los jugadores por otros equipos. De esta manera, poco a poco las estrellas fueron abandonando el estado de Alberta y Messier, Fuhr, Anderson y luego Graig McTavish aceptaban contratos más lucrativos, dejando el debate abierto de cuántas Cups más podrían haber ganado si Pocklington hubiese podido mantener sus estrellas en Edmonton. Sin ir más lejos, en los Rangers campeones del 94 jugaban nada menos que siete ex-Oilers, entre ellos Messier, Lowe, Graves y Tikkanen.
Con la espantada de las estrellas y unas elecciones poco convincentes en el draft, los Oilers pasaban por sus peores temporadas, quedándose fuera de playoffs en el 93 por primera vez desde que habían entrado en la NHL a pesar del emerger de Doug Weight y Jason Arnott.
También había problemas fuera del rink, ya que en el 98 los Oilers casi fueron vendidos a Houston pero sólo unas horas antes de hacerse efectiva la venta un consorcio de empresarios, The Edmonton Investors Group, compró el equipo a Pocklington y así se pudo mantener la franquicia en Alberta.
Aún así los Oilers se pudieron meter en playoffs por primera vez en cinco años y protagonizaban una sorpresa al eliminar al 2º seed Dallas Stars en la primera ronda. Esta eliminatoria daba el pistoletazo de salida a la rivalidad entre Edmonton y Dallas ya que entre el 97 y el 2003 estos dos equipos se iban a encontrar nada menos que seis veces en Playoffs, cinco de ellas en la primera ronda.
El 2003 vió nacer el Heritage Classic como parte de las celebraciones del 25º aniversario de los Oilers en la NHL. Fue el primer partido jugado “outdoors” y el rival elegido fueron los Montreal Canadiens, quienes ganaron por 4-3 delante de más de 50.000 espectadores en el Commonwealth Stadium de Edmonton.
Después del año del lockout en el 2004 y con la implantación del salary cap los Oilers vieron una oportunidad de hacerse con jugadores importantes y así se hicieron con el ex-ganador del Norris y Hart, Chris Pronger y el dos veces Selke Trophy, Mike Peca. Con estos jugadores, más el ídolo local Ryan Smyth, Rafi Torres, Shawn Horcoff, Ales Hemsky y Jarett Stoll los Oilers volvían a ser competitivos pero faltaba más solidez en gol, ya que ni Ty Conklin ni Jussi Markkanen parecían ser muy regulares. Así en la Trade Deadline del 2006 pudieron tradear por Dwayne Roloson y Sergei Samsonov provenientes de Wild y Bruins respectivamente.
Los Oilers quedaron octavos de la Western y se aseguraron los playoffs donde nadie daba un duro por ellos ante los Red Wings que venían de ganar la Presidents Trophy. Pero los Oilers sorprendieron a todos eliminando a los Wings en seis partidos y volvían a ganar una serie de playoffs desde 1998. En la semifinal de conferencia se deshicieron de los Sharks de Joe Thornton, también en seis partidos y se metían en la final de conferencia contra los Ducks donde una vez más partian como “underdog”. Era la primera vez que un 8º seed se metia en la final de conferencia desde que la NHL habia cambiado el formato de playoffs en el 94. En la final también dieron buena cuenta de los Ducks en cinco partidos y se volvian a meter en una final de la Stanley, esta vez contra los Carolina Hurricanes.
Era la primera final que jugaban dos equipos que antes habían sido integrantes de la WHA (los Canes habian sido los Hartford Whalers). Pero ahí se acabó el sueño de los Oilers y después de una disputada final cayeron en siete partidos.
Desde entonces, los Oilers han pasado por la NHL con más pena que gloria. Muchos jugadores que habian sido responsables del éxito de esos playoffs como Pronger, Smyth, Spacek o Samsonov y más recientemente Roloson, abandonaron Alberta y no han vuelto a jugar playoffs desde entonces.
Sigue la base de ese grupo como Hemsky, Horcoff o Moreau y el equipo se ha ido reforzando con Dustin Penner (en una acción bastante polémica por parte del GM Kevin Lowe porque fuéefichado de los Ducks cuando Penner era RFA), Sheldon Souray, Lubomir Visnovsky y Nikolai Khabibulin (este último en esta offseason) y cuentan con algunos jugadores jóvenes muy prometedores como las eternas promesas Patrick O’Sullivan y Rob Schremp, Marc Pouliot, Sam Gagner o Ryan Potulny que les harán luchar por los playoffs en esta próxima temporada.
Eso si, los tiempos de Wayne Gretzky y la dinastía de los Oilers queda bastante lejos y va a ser muy dificil de repetir.
Luis M Ledo aka Flea
Está muy bien, se lle del tirón. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarLuis