sábado, 25 de julio de 2009

DETROIT RED WINGS


Fundación: 1926
Localización: Detroit, Michigan
Central Division, Western Conference
Arena: Joe Louis Arena (20066 espectadores)
Mascota: Al “The Octopus”
Máximo Anotador: Gordie Howe 1.809 ptos
Máximo Goleador: Gordie Howe 786 goles.

Hockeytown, la ciudad por excelencia del hockey en USA, y la tercera en Stanley Cups ganadas, con 11 trofeos, solo por detrás de Montreal Canadiens (24) y Toronto Maple Leafs (13). Uno de los “original six” que instauraron el profesionalismo en el hockey.

Los Red Wings llegaron desde Victoria, en la British Columbia canadiense en 1926, tras el cierre de la WHL, y bautizaron al equipo como los Detroit Cougars, nombre que duraría 4 temporadas. En su primera temporada, al no haber pabellón disponible, jugaron en Windsor, Ontario, para volver a cruzar la frontera para jugar en el Detroit Olympia, que sería su hogar hasta el 79, cuando se mudarían al Joe, su actual casa.

En 1930 cambiarían su nombre a Detroit Falcons, pero 2 años después lo volverían a cambiar por el de Red Wings. El logo se debe a uno de sus primeros propietarios, James Norris, que había jugado al hockey en Montreal, en los Winged Wheelers. Al estar en la ciudad del motor, junto una rueda con el ala de un “warbling red wing”, un pájaro local, algo así como un tordo, para conseguir el primer logo de los Wings, que sería posteriormente perfeccionado.

En el 34 llegarían a su primeras finales, pero serian derrotados 3-1 por los Blackhawks de Chicago, sus odiados rivales. En el 36 tocarían el cielo con su primera Stanley Cup, ganando 3-1 a Toronto, y conseguirían el back to back en el quinto y último partido ante los Rangers de New York.
A principio de los 40, llegarían 3 temporadas seguidas a las finales, pero solo en la última, tras barrer a Boston, lograrían el titulo.

Y en esto llegamos a la primera fecha clave en la historia de los Wings: 1946, donde ficharían a una de las mayores leyendas de este deporte: Gordie Howe, a.k.a. “Mr Hockey”. La etapa de Howe en Detroit duraría desde el 46 hasta el 71, nada más y nada menos. 25 temporadas en las que el nombre de los Red Wings iba ligado automáticamente al de Howe. Incluso cuando un jugador en el mismo partido logra un gol, una asistencia y una pelea, se le conoce como el “Gordie Howe hat trick”, aunque dado el carácter afable de Howe, no consiguió muchos de sus hat trick. Ironías del hockey.
Tras una primera temporada discreta, pasaría a compartir línea con Sid Abel y Ted Lindsay, a los que se les conocería como “The Production Line”: Los jóvenes Howe y Lindsay, inseparables fuera de la rink, en las alas y el ya veterano Abel en el centro. Su facilidad para anotar les hizo acreedores a tal nombre. Así, entre el 50 y el 55, cayeron 4 Stanley Cups para los Red Wings, la época dorada, dominadores absolutos de la competición, ya que aparte de estas 4 Stanleys, consiguieron el mejor record de la competición 8 temporadas consecutivas, y llegando 17 temporadas seguidas a la post temporada.

Sin embargo, en la temporada 57, Lindsay seria traspasado a Chicago, rompiendo la magia, y aunque Detroit seguía llegando a Playoffs, la Stanley quedaba muy lejos, en una lenta y agónica decadencia.

En el 67, tras 17 años, quedan a 24 puntos de playoffs, dando inicio a la “Dead Era”. Entre el 67 y el 82, solo llegaron a playoffs 2 temporadas, y el equipo era conocido como los “Dead Wings”. En el 71 Howe se retiraba del hockey profesional, aunque seguiría jugando en alguna liga menor, donde llegó a coincidir con dos de sus hijos.

Y la historia empezaría a cambiar en el 83, con la llegada de Steve Yzerman, a.k.a. “Stevie Wonder” o simplemente Stevie Y. Ya en su temporada de novato, queda como máximo goleador del equipo, devolviendo a los Wings a Playoffs tras seis temporadas ausentes. Yzerman estaría 23 temporadas como profesional, vistiendo únicamente la elástica roja y blanca de los Wings. Por supuesto, su número 19 está retirado, tanto en los Red Wings como en la seleccion canadiense, y sus 20 años como capitán, es el récord de la NHL. Pero esta historia estuvo a punto de romperse. Yzerman se salía, superando los 60 goles por temporada con suma facilidad, pero los Wings seguían sin ser candidatos a nada, y en el 90, incluso no entraron en Playoffs, lo que hizo que Yzerman estuviese a punto de dejar el club. No fue así, y poco a poco empezó a llegar mucho talento a Detroit, sobre todo de la vieja Europa. Detroit fue uno de los primeros equipos en dar todo el crédito que se merecen a los jugadores europeos. En los 90, como en otros deportes, lo que venia desde el otro lado del Atlántico se miraba con cierto recelo. Así llegaron fueron llegando, en una primera oleada, mucho talento ruso, como el defensa Vladimir Konstantinov, Slava Kozlov, Slava Fetisov, Sergei Fedorov o Igor Larionov, autenticos cracks de la selección soviética, la “Red Army”. Tambien llegaría un jovencísimo Nicklas Lidstrom.


En el 95, los Wings volvían a pisar las finales, tras 29 años de ausencia, donde cayeron ante los Devils. Al año siguiente, caerían en finales de conferencia ante Colorado Avalanche....pero en el 97, tras derrotar a los Flyers en las finales, volvían a la gloria de la Stanley Cup 42 años después.
Pero la celebración se torno trágica, ya que en un accidente en limusina, Kostantinov sufriría daños cerebrales y su carrera acabaria antes de tiempo. La temporada siguiente, que también acabo con el titulo en la saca, fue dedicada enteramente a Kostantinov, que recogio el premio en silla de ruedas.

En el 2002 volverían a ganar la Stanley, tras las adiciones de jugadores de la talla de Luc Robitaille, a quien el grupo sueco Mando Diao dedico una cancion en su tercer LP, Brett Hull o uno de los mejores porteros de la historia, el poco ortodoxo checo Dominic Hasek, “The Dominator”.


Los Wings en toda esta época se han mantenido en la brecha, sobre todo gracias al acierto en la gerencia en fichar talento joven. Clave es su ojeador europeo, Hakan Andersson, que ve petróleo donde no hay

nada. Gracias a su labor, han conseguido jugadores como Jonathan Ericsson, elegido en la novena ronda (numero 291), Johan Franzen, en el numero 97, Tomas Holmstrom, en el numero 257, Pavel Datsyuk en el 171, o el gran Henrik Zetterberg, en el 210, entre otros, como Mikael Samuelsson, Jiri Hudler, Nickas Kronwall o el fines Valtteri Filppula.

Fruto de este carácter europeista, haria que en el 2008, Nicklas Lidstrom, uno de los mejores defensas de la historia, fuese el primer europeo en levantar la Stanley Cap, ganada en 6 partidos a los Penguins. Nunca antes un jugador del viejo continente habia tenido tal honor. En el 2009, los Penguins se tomarían la revancha, ganando en 7 partidos a los Wings, que seguirán dando mucha guerra en los próximos años con esa mezcla de clase y talento europeo con la fuerza de los jugadores norteamericanos.




Juanjo

3 comentarios:

  1. Que impactante el tema de Konstantinov, tuvo que ser muy emotivo verlo recoger el trofeo en silla de ruedas.

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  2. ya te digo...pone los pelos de punta.

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  3. Aquella primera temporada de Stevie Y tuvo que ser acojonante...

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